martes, 21 de junio de 2011

Necesito que me necesites.....



La pesadilla del perderte me halló al encontrarte,

con tu claridad trajiste un algo oscuro, la sombra de la desdicha

martilleando en mi supuesta felicidad,

la neblina del rencor, el regocijo del dolor ajeno

cuando uno se sabe con el poder en las manos,

porque me tienes a tu merced, enmarañada en tus deseos,

me tambaleo y rijo al compás de tu voz y tus latidos,

me despeño y fallezco en tus dudas,

no me reconozco en paz ni en soledad,

solo en el bravío cabalgar a tu lado encuentro un yo con sentido,

tal vez a tu marcha me vuelva humo,

a lo mejor ni siquiera muero,

simplemente iré desapareciendo a los ojos del mundo......


Intentó ser de piedra, pero de nada sirvió se rescrebajaba a golpes, sueña con ser de mimbre que se dobla antes que partirse, ansía poder tejerse y tener un caparazón, sus latidos surcan el cielo y caen a plomo, se embriaga de la nada y la nada trenza, mientras tanto se conforma con latir al compás de su respiración de ello se alimenta y de ello vive. Porque él es su droga y sin él se convierte en nada.


Mi invierno nunca ha dado paso a una florida primavera ni ésta a un verano invencible pero tú me alegras los días.

Te quiero tanto que duele, pero la vida si te fueras dolería más que nunca.....

Tengo miedo, miedo a que no me necesites tanto como lo hago yo, pero si no lo tuviera no te querría por eso tengo la certeza de que lo hago y lo hago durante todo el día no sólo hasta el alba, ni te puedo cambiar con las sábanas.......